Por Bernardo Barranco V.
Los obispos carecen de dos factores básicos: proyecto y carisma; dicho de otra manera: un ideal histórico de pastoralidad y liderazgo en la sociedad. La pandemia ha mermado sus ingresos y hay diócesis en bancarrota. Continúan los escándalos de encubrimientos y pederastia que han lacerado su imagen.