SE ABRE ESCENARIO FAVORABLE HACIA FINAL DEL AÑO.
Ricardo Caballero de la Rosa
La economía mexicana creció un 3.6% anual en el primer semestre del año, una cifra mayor a la anticipada por especialistas del sector privado y cuya tendencia a la alta es probable que siga superando las expectativas.
En efecto, desde un punto de vista pesimista, si la economía del país dejara de crecer durante el segundo semestre del año y el nivel absoluto del producto interno bruto se mantuviera en niveles similares a los observados en el segundo trimestre, su valor crecería al menos en un 2.5% a tasa anual en el tercer trimestre y a una cifra de 1.9% en el cuarto trimestre, es decir, un promedio de 2.2%, dando lugar como resultado a un ritmo de crecimiento anual de 2.9% en un escenario pesimista.
La estimación para el cierre del ejercicio 2023 proveniente de la encuesta sobre las expectativas de los especialistas en economía del sector privado de julio de 2023, publicada por el Banco de México, llegó a 2.5% y para 2024 a 1.5%. De este modo, dicha estimación, ahora, seguro será rebasada.
Con estos datos, aunque la economía modere su crecimiento en lo que resta del año, con seguridad podrá alcanzar la previsión de crecimiento del 3% señalada por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y superaría la cifra estimada por el Fondo Monetario Internacional que llegó a 2.6%.
Hay varias razones para que este escenario ocurra. Según datos del INEGI, el sector terciario aporta el 64% del total, en tanto la industria (sector secundario) representa el 28% y el sector primario un 8%. Así, el sector terciario de la economía, que incluye comercio y servicios, ha mostrado un comportamiento favorable y por su peso en la economía debería arrastrar a los demás, ya que el dinamismo del PIB deriva precisamente de este sector, el cual ha tenido un crecimiento a una tasa de 4.1%, la más alta en el conjunto de la economía.
Además, si se presentara durante el segundo semestre del año una desaceleración económica en los Estados Unidos, la industria agroexportadora y la manufacturera serían las más afectadas, esto es, los sectores primario y secundario, en tanto que el sector terciario, con más vinculaciones al mercado interno, podría resistir mejor.
Hay que tomar en cuenta que el salario formal, el nominal y las remesas han crecido. Así, el empleo formal registró un crecimiento del 3.9% en junio, con tendencias al crecimiento. En el caso del salario nominal, con el que cotiza al IMSS, este creció a un ritmo de 11.2% en junio, lo que implica un crecimiento del salario real en 5.8%. La masa salarial real habría crecido así en 9.9%, considerando el efecto combinado del empleo y los salarios.
Si a estos factores se suman las remesas recibidas, cuyo nivel está en los 60 mil millones de dólares, y un crecimiento del crédito al consumo por parte de la banca comercial de 12.6%, en términos reales, según cifras del Banco de México, tenemos condiciones adecuadas para que el país mantenga su ritmo y cierre con favorables expectativas.
Mi correo Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Las opiniones y comentarios aquí vertidos no son responsabilidad de conceptouno.tv si no de quien las emite.
