EN MÉXICO CAE EL EMPLEO Y LA PRODUCCIÓN INDUSTRIAL.
Ricardo Caballero de la Rosa
Atravesamos la peor de las recesiones globales en casi un siglo, pero la crisis sanitaria aún no cesa y los problemas no terminan aún pues se puede esperar una segunda ola de contagios, lo que sería un escenario por demás complicado. Por esta razón, en los próximos meses será determinante contener la epidemia si el mundo y México quieren crecer y desarrollarse.
En la perspectiva internacional, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su último análisis de datos económicos mundiales, comentó que la emergencia ha provocado cientos de millones de personas que se han quedado sin trabajo, que está impactando gravemente a los pobres y a los jóvenes y agravando las de por sí estructuras socioeconómicas de desigualdad.
En estas condiciones de grave incertidumbre es muy difícil establecer algún tipo de previsión. Sin embargo, si la segunda ola de contagios no se presenta, la OCDE prevé una caída mundial de la producción económica del 6% en 2020 y un aumento de 2.8% para 2021. Pero si llegara a reaparecer el coronavirus, los resultados serían de una contracción de 7.6% en este año, con escasa recuperación para el año entrante.
Según la OCDE, si en México ocurre un escenario de un solo momento de contagios, la caída de la economía sería de 7.5% y empezaría a recuperarse en el segundo semestre de 2020 gracias a las exportaciones y al consumo. Para 2021 el PIB podría crecer un 3%. Sin embargo, si se agudizara la emergencia con otra ola de infecciones, el país se contraería 8.6% en 2020 y se esperaría un crecimiento de 2% en 2021.
Los síntomas económicos de la crisis ya se observan de manera cruda. En materia de empleo, por ejemplo, la situación es particularmente alarmante, pues según datos del Instituto Mexicano del Seguridad Social (IMSS) en marzo se perdieron 130 mil 593 empleos, 555 mil 247 en abril y 344 mil 526 es mayo, es decir, una cifra acumulada de un millón 30 mil 366 plazas en lo que va de la pandemia.
Por otro lado, el INEGI dio conocer el Indicador Mensual de la Actividad Industrial (IMAI) el cual registró una caída real de -25.1% en el mes de abril del presente año respecto al mes previo, con base en cifras desestacionalizadas.
Por componentes, la construcción se redujo -32.8%, las industrias manufactureras -30.5%, la minería -5.6% y la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final -1.1% durante el cuarto mes de 2020 frente al mes anterior.
En su comparación anual, la producción industrial retrocedió -29.6% en términos reales en abril. Por sectores de actividad económica, la construcción disminuyó -38.4%, las industrias manufactureras -35.5%, la minería -3.6% y la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final fue menor en -3.5%.
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