IMPORTANTE MANTENER LA ESTABILIDAD.
Ricardo Caballero de la Rosa
Mientras se debate hasta qué nivel podría crecer la economía en 2021 y se plantea el propósito de que este momento coyuntural se traduzca en una recuperación sostenida que permita tener un movimiento de expansión que se sostenga en 2022, para impactar favorablemente hacia 2024, las expectativas inflacionarias crecen y se hace importante mantener la estabilidad.
Aunque el secretario de Hacienda Herrera no estima se pueda repetir un escenario de cierre de la economía, puesto que se ha avanzado en la vacunación generalizada y no se han incrementado las hospitalizaciones, a pesar de nuevos niveles de contagios registrados en los últimos días, la inflación liga cuatro meses de aumentos y en junio de este año llegó a 5.88% anual, con lo que se está muy arriba del rango de la meta inflacionaria marcada por el Banco de México.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), dicho resultado representó una ligera desaceleración respecto a mayo cuando se ubicó en 5.89%. Además, es la menor inflación desde marzo pasado, cuando se colocó en 4.67%.
Además, el índice de precios subyacente, que es aquel que excluye de su contabilidad los productos de alta volatilidad de precios, tuvo una variación de 4.58% anual, la más alta desde diciembre de 2017, cuando registró 4.87%.
La balanza no subyacente, que contabiliza los productos que presentan una alta volatilidad en sus precios, como los productos agrícolas o los combustibles, tuvo un incremento a 10%, una desaceleración respecto a mayo cuando registró 10.76%.
De manera desagregada, los precios de los productos agropecuarios se ubicaron en 6.95%, mientras que los de los energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno presentaron una alza de 12.45%, esto respecto al mismo periodo del año pasado.
Los productos que más subieron fueron el transporte aéreo (51.55%), gas doméstico LP (30.58%), gasolina de alto octanaje (21.93%), pollo (18.83%), aceites y grasas vegetales comestibles (18.27%) y la gasolina de bajo octanaje (15.07%), que tuvieron las mayores variaciones al alza.
Los productos que, al contrario, disminuyeron sus precios fueron el huevo (2.74%), chile poblano (5.48%), naranja (9.76%), aguacate (1.71%) y papa y otros tubérculos (0.53%).
Ya la inflación fue considerada por el presidente Andrés Manuel López Obrador como tema preocupante y debido a su comportamiento fuera del rango el propio Banco de México aumentó recientemente en 25 puntos base la tasa de interés de referencia para quedar en 4.25%.
Por otro lado, según la minuta de la última sesión de la Junta de Gobierno del Banco de México, éste percibe que el ritmo de la recuperación económica del país se ha “moderado” y aún es “incompleta”, por lo que deberán estar bien coordinadas las políticas monetaria, inflacionaria y fiscal.
No hay que perder de vista que la inflación ha mostrado presiones muy significativas en los meses anteriores. No obstante, en su mayoría parecen estar asociadas a problemas en la oferta y cambios en los patrones de consumo, atribuibles por supuesto a la pandemia, la cual sigue siendo el reto más importante.
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