LA INFLACIÓN PODRÍA ESTAR ARRIBA DE LA META DEL BANCO DE MÉXICO.
Ricardo Caballero de la Rosa
La más reciente Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado, del mes de junio de 2021, publicada por el Banco de México, señala que para este año la expectativa de crecimiento es de 5.80% y 2.80% para el año entrante.
Por su parte, cuarenta y tres instituciones que se dedican al análisis financiero elevaron su pronóstico de crecimiento para México. El consenso entre ellas es que la economía mexicana crecerá 5.7% en 2021, 0.4% más que lo proyectado en mayo, según el reporte de la firma Focus Economics.
Entre los bancos e instituciones consultados, la proyección más alta es la de JP Morgan, la cual prevé que el producto interno bruto (PIB) de México avance 6.8% este año. Para la organización no gubernamental denominada CABI, el crecimiento sería de sólo 4.3%, siendo la tendencia más baja. Para 2022 el consenso entre las 43 instituciones apunta a 3% por ciento.
Como se observa, las expectativas se cifran sobre datos similares, tanto para este año como para 2022. Como lo hemos apuntado en notas anteriores, la actividad económica fue intensa en marzo, debido sobre todo al rápido crecimiento del sector de servicios. Es probable que el impulso más fuerte registrado al final del primer trimestre se haya trasladado al segundo trimestre, ayudado por el programa de vacunación que está en operación, el relativo aumento de los contagios de COVID-19 que no se han traducido en un aumento descontrolado de fallecimientos, así como el repunte de la actividad en Estados Unidos y la mejora de la confianza.
Es probable que un débil apoyo fiscal afecte la demanda interna, sobre todo para el tercer trimestre del año. Asimismo, aunque el programa de vacunación está en marcha se siguen reportando contagios, lo que condiciona el entorno empresarial como incierto, lo que parece nublar las perspectivas para el año.
La decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de postular a su actual secretario de Hacienda, Arturo Herrera, a la gubernatura del Banco de México y, en su lugar, poner a Rogelio Ramírez de la O, pone énfasis en el enfoque de la administración en el gasto social mientras ejerce la austeridad fiscal, pero conlleva serios interrogantes sobre la autonomía del banco central.
Uno de los temas delicados sigue siendo la inflación. El panel consultado por Focus Economics prevé que la inflación se desacelerará a lo largo del año a medida que se reduzca el efecto base de 2020, pero aún con ello se espera que cierre por arriba del objetivo de Banco de México, debido a los altos precios de las materias primas y la recuperación de la actividad económica.
Los analistas calculan que la inflación terminará 2021 en 5.2%, arriba del rango objetivo que es de 3% con un intervalo de un punto hacia arriba o abajo. Para 2022, se estima que el indicador de precios cierre en 3.6%.
A raíz de la presión por el aumento de precios, los analistas de Focus Economics esperan que la tasa de referencia del Banco de México finalice 2021 en 4.77% y 5.17% en 2022, por arriba de su actual 4.25%.
Si bien se prevé que el consumo interno crezca 6.2% este año, las exportaciones de mercancías aumentarán 12.5% en 2021 y las importaciones 17.6%, lo que llevará la balanza comercial a un superávit de 18 mil 700 millones de dólares.
A la par, los analistas proyectan que las remesas aumentarán a 44 mil 700 millones en 2021, impulsadas por el estímulo fiscal y la caída del desempleo en Estados Unidos.
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