Columna de Héctor Manuel Pérez Cuéllar
En este País de los horrores, donde el discurso dice una cosa y lo grotesco los exhibe. Faltaba ver la tétrica imagen, que en el hocico de un perro tiene la cabeza de un ser humano y transitar por una calle de Monte Escobedo, Zacatecas y el grave linchamiento de un elemento de la Policía Investigadora de Hidalgo por una turba de delincuentes, porque no se les puede llamar de otra manera, en la localidad de Santa María Asunción en Tulancingo Hidalgo. ¿Qué sigue Andrés Manuel? para que te convenzas que tu estrategia de Seguridad está fallida.
Pregunta: ¿Ésta, Andrés Manuel, es tu Estrategia de Abrazos y no Balazos? o explícanos, que más tenemos que ver, donde existe la frontera de la obediencia de la Ley y la de me vale madre la Autoridad, porque es débil o cómplice, porque eso parece, no hay otra explicación hacemos muchas reflexiones grupos pero que como Sociedad , estamos solos ante las acciones violentas de los criminales de cualquier índole.
Cuando hacen acto de presencia las autoridades de cualquier orden de Gobierno o son insuficientes o llegan retrasadas como en Totolapan en Guerrero o, sencillamente su presencia no ofrece ninguna actividad que determine que se actúa para derrotar una violencia y horror que vivimos, los índices de violencia no tienen comparación con ninguna otra etapa de México, no es de ahora, es de siempre, la operación de las Fuerzas Armadas, muestra nula capacidad para frenar, ya no se diga erradicar, tanta actividad delictiva y mucho menos lo que en Seguridad Pública se refiere a la Prevención del Delito.
En el Porfiriato, los famosos Gendarmes estaban muy desprestigiados, así como hoy las Fuerzas Armadas que solo en el discurso “son muy reconocidos”, pero en la realidad, no dan pie con bola.
Porfirio Diaz sacó al Ejército como un instrumento de represión. ¿Acaso las acciones actuales que realiza el Presidente Andrés Manuel, no se pueden situar en un símil de una política militarista, donde se erigen las Fuerzas Armadas como la Súper Secretaría de México, que realiza de todo y los convierte en algo como la película de Héctor Suárez “Los Mil Usos”, el demerito que se tiene a la vida civil, en época ninguna ha sido tan arraigada y manifiesta, así como en la época de Porfirio Diaz, los derechos políticos con sus aliados en las cámaras de Diputados y Senadores , Andrés Manuel da carpetazo a todo lo que está en contra de su régimen.
El mundo "civilón", como se expresan los militares, ahora, el de vivir en una Dictadura será disfrazada donde esos actores militares cuando realicen actos contrarios al Derecho, tienen la oportunidad de comparar ante tribunales civiles o ceñirse al fuero Militar y comparar o ser perdonados por el propio Secretario de la Defensa. ¿Hasta dónde Andrés Manuel? .
La inacción o la cooperación de los militares con los Grupos Criminales genera acciones de ese disque “Pueblo Bueno”, en turbas de delincuentes que cuando quieren realizar actos de barbarie, como los acontecidos en Hidalgo, sin piedad alguna contra unos simples pero a la vez valientes servidores públicos, que solo hicieron su trabajo. Quedan en indefensión de apoyo, observen ustedes en la foto que comparto, se ve a una niña en esas escenas, que son ya un panorama cotidiano de nuestro México, que tapa los ojos de su hermanito, como impidiendo de alguna manera que no observe el horror de una realidad que este gobierno no ha sido capaz de frenar. ¿Qué le contesta el presidente a este infante? ¿Qué en su pensamiento infantil será pequeño?¿Qué le contestan a los familiares del Funcionario fallecido? ¿Qué justifica la barbarie humana? ¿Dónde en el momento oportuno, se encontraron las Fuerzas Armadas que ahora tienen la Seguridad Pública bajo su responsabilidad? en fin, son estás y muchas preguntas que desde el púlpito mañanero, no se podrá contestar.
Los problemas son por mucho, un Estado Fallido. Las imágenes lo determinan y, lo documentan, el accionar del Gobierno se enfrasca en reformar la Constitución para darle ese poder, a las Fuerzas Armadas de ser incuestionables y de esta forma el Presidente ganar tiempo, para encarar el grave problema en el que estamos, Sabemos que es un hombre terco, declarado por él mismo, entonces no esperemos que cambie su política fallida. Han surgido propuestas de todo, hasta la reciente de establecer una tregua con los Grupos Criminales, pero solo en mi opinión, son distractores, para justificar el gran tiradero que se tiene en la Seguridad Pública, el solo pensar que los Delincuentes no son enemigos es la mayor falacia que se ha escuchado, ya van 17 Congresos de los Estados, que han dado el visto bueno,
En el campo de lo que podemos hacer y en el campo de lo que no podemos hacer, se encuentra nuestra disyuntiva, los ciudadanos si no actuamos tendremos a la distancia mucho de que lamentarnos, imaginen que esos 500 homicidios, se multiplican por el número de semanas que le restan a este Gobierno, más, menos, 104 semanas, por 500 homicidios por semana, son 52 mil homicidios, así sería el panorama, sé que es impensable pero ya nada nos debe de sorprender y menos no considerar que hay que hacer , lo que se tiene que hacer y buscar una solución firme donde el brazo de la Justicia, actúe por las buenas o por las malas no hay otro camino.
“contra factum non valet argumentum, contra los hechos no hay argumento que valga”. (Aforismo)
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