PRESENCIA DEL IMSS-BIENESTAR EN 23 ESTADOS.
Ricardo Caballero de la Rosa
Los estados reciben recursos del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (Fassa) que están destinados para el sostenimiento de los sistemas estatales de salud, desde 1998 con la descentralización promovida por el gobierno de Zedillo. Sin embargo, diversas reformas a la Ley de Coordinación Fiscal y a la Ley General de Salud permitirán que los recursos de este fondo sean transferidos al gobierno federal.
Desde 2019 la Ley General de Salud estableció en el artículo 13 que las entidades federativas podrían acordar con la Secretaría de Salud o cualquier otra entidad coordinada del sector ceder la organización, operación, supervisión y evaluación de la prestación de los servicios de salubridad general.
Son 23 las entidades federativas que decidieron adherirse al Organismo Público Descentralizado IMSS-Bienestar (OPD IMSS-Bienestar), utilizar esta facultad y firmar convenios de coordinación para que sea el OPD IMSS-Bienestar el encargado de la prestación de los servicios de salubridad general en sus respectivos territorios. Las nueve entidades restantes continuarán con la responsabilidad de brindar dichos servicios.
Estos hechos implican que habrá dos mecanismos para la distribución de los recursos del Fassa: uno, para las entidades adheridas al OPD IMSS-Bienestar, y otro para las no adheridas a este organismo.
Con base en el presupuesto de egresos federales 2024, de cada 100 pesos provenientes del Fassa:
· 66 centavos cubren la prestación de servicios de salud a la persona (atención preventiva, diagnóstico, tratamiento y rehabilitación, así como la atención de urgencias);
· 24, pagan la prestación de servicios de salud a la comunidad (vigilancia epidemiológica, salud ambiental, control de vectores y regulación sanitaria);
· 5.5, financie la rectoría del sistema de salud (generación de información, evaluación del desempeño, regulación y emisión de normatividad en materia de salud),
· y 4.2 cubren la generación de recursos para la salud (comercialización de biológicos y reactivos, formación y desarrollo de recursos humanos, así como el desarrollo de la infraestructura y equipamiento).
A las entidades federativas que se han adherido al IMSS-Bienestar, sólo les corresponderán formular y desarrollar programas locales de salud y elaborar información estadística local para proporcionar a las autoridades federales competentes, por lo que cederán cerca del 90% de los recursos que recibirán.
El OPD IMSS-Bienestar recibirá para 2024 cerca de 106 mil millones de pesos adicionales provenientes del Fassa y pertenecientes a las entidades adheridas. Pero quedan muchas dudas en torno a cómo se distribuirán los recursos para pagar la nómina del personal de salud adscrito a los sistemas estatales de salud que se cubren con recursos del Fassa, para el mantenimiento y equipamiento de las unidades de salud, para la construcción y remodelación de los hospitales y para los programas de vacunación.
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